Bitcoin: Una innovación que es furor (y Mr. Goxx lo sabe)
Hay una expresión en el mundo de la inversión llamada FOMO (en inglés, Fear Of Missing Out), o miedo de quedarse fuera o perderse algo y según los estudios de los economistas, está relacionado con las emociones de las inversiones e influye en la toma de decisiones. ¿un ejemplo clásico? Las criptomonedas.
El fenómeno Bitcoin ha sido uno de los más efervescentes que se ha visto en la última década. Una moneda digital creada (se supone) por Satoshi Nakamoto, un pseudónimo de un ingeniero japonés que no se sabe si es una persona de carne y hueso, un colectivo o un “fantasma”, y hasta el día de hoy, no hay imágenes fiables ni apenas rastro.
El vacío sobre su figura data del 12 de diciembre de 2010, cuando se compartieron unas escuetas instrucciones para evitar el colapso de su invento. "More work to do" (Más trabajo por hacer), en referencia a la protección interna. Luego de ello, se desconectó y nunca más se tuvieron noticias del ingeniero. El inquietante silencio online y offline se espesó desde entonces.
Cada 22 de mayo se conmemora la primera transacción con bitcoin de la historia (se llama, el bitcoin pizza day): Un usuario pagó el equivalente a unos USD 30 por 2 pizzas familiares. ¿el monto en Bitcoin? 10.000 BTC ¡diez mil bitcoin!, que hoy serían alrededor de 410 millones de dólares o $ 320.000 millones de pesos o para que lo entienda, cercano a todo el apoyo del Gobierno de Chile para reactivar el sector turismo en el Presupuesto 2021 (Prioridades Presupuesto 2021 – Gobierno de Chile), una locura.
¿Una locura? A ojos de quién y cuando. Ese usuario (que hoy podría decirse que es un “estúpido”), fue a una pizzería real y pagó con una moneda digital creada por alguien o algo que pocos conocían. Transformó su valor creado de la nada (minería bitcoin), en un tangible real: 2 pizzas. Si nos remontamos al año 2010, casi nadie hablaba de bitcoin (y tampoco de blockchain, que es la tecnología que le da soporte) ¿Quién iba a creer que esta moneda digital iba a convertirse en uno de los activos más valiosos?
Hoy, 1 bitcoin equivale a algo más de USD 40.000 y es furor. El presidente de El Salvador, Nayib Bukele emitió una ley que fue aprobada por el Congreso, para aceptar el bitcoin como moneda de curso legal: Pagas en dólares o en bitcoin. Panamá y Paraguay están pensando en seguir los pasos de El Salvador. En China, por su parte, está prohibida. Muchos creen que es un activo que se asemeja a lo que hace el patrón oro. Es decir, dado que Estados Unidos y casi todos los países del mundo han emitido dinero al país para hacer frente a la recesión económica producto del Covid-19 (o sea imprimir billetes a destajo y entregarlo a los ciudadanos), se espera que la inflación aumenté a niveles nunca antes vistos en países serios (Venezuela y Argentina no cuentan), por lo que una moneda que no dependa de un Banco Central o Reserva Federal, no perdería su valor, entendiendo que hay una cantidad limitada de Bitcoin en circulación y nadie puede manipular.
Y debo reconocer que el fenómeno FOMO me atrapó. A fines del año 2020 compré una porción de Bitcoin a un valor de USD 10.000 pero meses después vendí a USD 9900. Acepto que perdí plata, poco, pero perdí. Al entrar, mi visión fue protegerme contra la inflación (cosa que sucedió 8 meses después), pero me salí porque al bitcoin no le creo. Respeto a quienes han ganado dinero con la compra y venta de bitcoin, pero a juicio personal creo que es un pseudo-activo. Ganan mucho dinero quienes transan de pesos/dólares a bitcoin (por ejemplo, Binance, Coinbase, Buda.com, Crytomkt.com, Orionx) porque cobran una comisión al comprar y vender, y para mí, el bitcoin tiene excesiva volatilidad, falta de regulación e incluso existen figuras públicas mundiales, como Elon Musk, que con un simple tweet inflan o destrozan el precio en segundos.
Charlie Munger, inversionista, socio de Warren Buffet y vicepresidente de Berkshire Hathaway, señaló en una entrevista que el bitcoin es “repugnante y contrario a los intereses de la civilización”, entendiendo que esta moneda es muy útil para secuestradores, extorsionistas, lavado de activos, carteles de narcos, contrabando, entre otros, dado los “beneficios” de operar digitalmente sin rastro aparente.
E historias no faltan, Mr. Goxx es un inversor que arrasa en el mundo de las criptomonedas, desde que empezó a operar, su cartera tiene un rendimiento del 19,41% superando al Dow Jones, la empresa de Buffett y Munger e incluso el propio mercado de las criptomonedas. ¿Lo curioso?, es que Mr. Goxx es un hámster, que a través de su “rueda de intenciones”, elige qué criptodivisa desea negociar ese día y el piso de su oficina tiene dos túneles cercanos: uno para comprar y otro para vender. Cada vez que pasa por un túnel, los dispositivos electrónicos conectados al suelo de su jaula completan una operación de acuerdo con lo elegido. Y en el último mes no le podía haber ido mejor (As.com).
La historia dirá qué pasos seguirá el bitcoin, si bien para muchos es una innovación grandiosa, que así lo creo, hoy por hoy, debemos tener muchas precauciones al momento de invertir nuestros ahorros en criptos. Yo simplemente, prefiero invertir en empresas reales.
La columna de Lucho.